8 de marzo, Día Internacional de la Mujer

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Hoy, en el Día Internacional de la Mujer homenajeamos a Paulina Luisi, primera médica del Uruguay.

Paulina y sus hermanas (Clotilde, Luisa, Inés, Elena y Anita) estudiaron para maestras, dónde se destacaron por su independencia. Luego de recibirse de Maestra, Paulina ingresó en 1900 a la Facultad de Medicina, recibiéndose de doctor en Medicina y Cirugía en 1908.

Su hermana Clotilde fue la primera abogada del Uruguay y Luisa una poetisa y destacada pedagoga.

Todas fueron ejemplos de mujeres emancipadas.

Paulina soportó la burla de sus compañeros y los prejuicios de una sociedad que se alarmaba porque una mujer viera pacientes hombres.

Coincidiendo con la inauguración del Hospital Pereira Rossell, siendo ya médica, hizo la especialización en dermatología y enfermedades venéreas en París en 1923. Ejerció la docencia el la Enseñanza Secundaria y ocupó la cátedra en Facultad de Medicina donde pudo disponer de un laboratorio propio para sus investigaciones sobre fecundación y fertilidad.

Paulina fue fundadora del feminismo uruguayo, al crear el Consejo Nacional de Mujeres, convencida de que sólo a través de la unión de las mujeres mismas, se obtendrían las reformas a las que aspiraban. Desarrolló una intensa labor en la defensa de los derechos de la mujer: para liberar a la mujer de la tutoría del hombre y su consecuente crecimiento moral e intelectual como persona.

Fue la primera mujer latinoamericana en concurrir en representación del gobierno a la Sociedad de las Naciones y delegada del gobierno en la Comisión de Protección a la Infancia y la Juventud (1922-1932).

Promotora y luchadora incansable de los derechos de la mujer, entre ellos el voto femenino, el cual se concretó en 1932. Activista por la paz mundial, concurrió a la Conferencia Internacional sobre el Desarme en 1932, a la que asistieron sólo cinco mujeres. Ocupó cargos en numerosas organizaciones internacionales en defensa de los derechos de la mujer.

Tuvo una ardiente vocación de justicia, creó organizaciones sociales y sindicales de mujeres; la Unión de Telefonistas y el sindicato de Costureras de Sastrerías.

Paulina trabajó intensamente en todos los temas de su especialidad médica. Publicó varios trabajos y entre otras obras, una tan audaz como "La enseñanza sexual" donde proponía una enseñanza en las escuelas tanto a las niñas como a los varones.

Fue condecorada por el gobierno portugués y el español, con la encomienda de la Orden de Alfonso XII por sus trabajos sobre prostitución y lucha contra la trata de mujeres.

Falleció en Montevideo a los setenta y cinco años de edad. La Facultad de medicina honró su memoria dando el nombre de "Paulina Luisa" a una de las salas de su biblioteca, así como también  desde 2006 el Hospital de la Mujer dentro del Hospital Pereira Rossell que con justicia lleva su nombre.

Su ejemplo de vida ha servido como inspiración para muchas mujeres uruguayas que hoy luchan por los derechos y la salud de la mujer.